martes, 30 de octubre de 2007

El Lavagnamóvil recorrió sus últimos kilómetros en La Matanza

HUBO MOMENTOS EMOTIVOS Y OTROS MAS DISTENDIDOS

En un maratónico cierre en el conurbano bonaerense, el líder de UNA estuvo con un grupo de madres contra la impunidad y con estudiantes universitarios.

De acá para allá. Así se mueven los colaboradores de Roberto Lavagna en el cierre de la campaña. El candidato había estado por la mañana en La Plata y en Lomas de Zamora, pero eso no es suficiente para el hombre de UNA (Una Nación Avanzada) quien por la tarde ya aseguró su presencia en San Justo, en el Partido de La Matanza.
La caravana lavagnista parte del Centro de Buenos Aires cerca de las cuatro de la tarde en una combi. El grupo está compuesto por unos pocos periodistas y hombres del partido que ofician de coordinadores. Una hora más tarde, el chofer estaciona en el playón de un hipermercado en La Matanza. La espera bajo el sol se hace algo larga. Nadie entiende qué es lo que pasa.
Veinte minutos después llega Lavagna al lugar vestido con camisa y pantalón de jean. El hombre saluda uno por uno a los periodistas y suelta una frase insólita: “El Lavagnamóvil se perdió, quedó como veinte cuadras atrás”. Se trata del micro de dos pisos con el que el candidato recorrió la Ciudad y el conurbano bonaerense y que ahora se encontraba desorientado. Finalmente llega el enorme vehículo, el cual tiene impresa la figura del candidato en ambos lados y atrás uno de los slogan del candidato: “Argentina tiene con qué”. Los periodistas pasan al micro de campaña. El viaje puede proseguir.
A las cinco y media de la tarde, la hora pactada, el Lavagnamóvil estaciona a unos metros de la sede da la asociación Madres de La Matanza contra la Impunidad. La humilde casa se ubica en la calle Peribuey 2383. Allí adentro, en una pequeña habitación, las madres esperan a Lavagna y a su candidato a vicepresidente, Gerardo Morales, sentadas alrededor de una mesa. Cada una de ellas porta un prendedor con el rostro de un chico. Las paredes celestes están despintadas, el techo blanco tiene varias manchas de humedad, en las paredes fotos de más jóvenes y recortes de diarios en los que se hace mención al “gatillo fácil”. En ese pequeño recinto, gaseosa y agua de por medio, el candidato de UNA dialoga con ese grupo de madres y les explica su plan de seguridad.
Mientras adentro reina la emotividad, afuera hay un caos de tránsito. Es que el Lavagnamóvil estacionado ocupa un carril entero de la angosta calle que encima es doble mano. Los bocinazos, los insultos y las maniobras arriesgadas para pasar cómo sea se reiteran una y otra vez.
Minutos después, la fórmula de UNA deja ese lugar. La caravana continúa, ahora el itinerario marca Universidad Nacional de La Matanza. Al llegar, la sorpresa de los jóvenes es grande: “Mirá es Lavagna”, le dice una chica a su amiga y señala al hombre del día. Rodeado de sus colaboradores y de algunos curiosos que decidieron seguirlo, Lavagna y Morales recorren los pasillos de la facultad. Una profesora saluda al primero y aprovecha para tomarse una foto. El recorrido sigue, los candidatos no dejan un solo rincón sin visitar. Llegan a la pista de atletismo y uno de los asistentes le dice a modo de broma: “Recorriste ochenta mil kilómetros y ahora no tenés aire para dar una vuelta”. Lavagna se ríe, lo mismo hace Morales, mientras habla por celular.
La noche está cayendo. Agotado, Lavagna agradece por el apoyo recibido y se sube a un auto particular. A la caravana sólo le queda emprender el camino de regreso tras un día agotador.

Gabriel Sabino

2115 CRUCES BLANCAS BAJO EL SOL DE BELGRANO

Lavagna presentó su plan de seguridad en un acto cargado de simbolismos.


Diez, cien, mil y mas también. Son cruces blancas estaqueadas en el verde césped. El sol cae casi de lleno sobre ellas imprimiendo en el suelo una breve sombra. El día se presenta con un cielo diáfano y una temperatura ideal, corre una leve brisa, pero hay un elemento que rompe con esta imagen sepulcral, el sonido o mejor dicho el ruido, aviones, trenes y miles de autos quiebran la ilusión. No es el cementerio argentino de Darwin ni mucho menos, es solo un pequeño espacio verde dentro de la gigantesca urbe, un triangulo de pasto flanqueado por la avenida Figueroa Alcorta a un lado y por la Lugones al otro, ubicado debajo del corredor aéreo que trae a los vuelos de cabotaje al aeroparque Jorge Newbery.
Como un día mas en el parque, paseadores de perros, ciclistas, personas haciendo footing o caminando ligero dejan transcurrir el tiempo, aunque esta vez sus rostros dejan ver la curiosidad por el novedoso panorama. A las cruces se le suman unas cincuenta personas, entre organizadores candidatos y periodistas, aunque no hay público, ni espontáneo, ni traído. Hoy es jueves 18 de octubre y este es otro de los mini actos Lavagna, en este caso para presentar su plan de seguridad, y el lugar no esta seleccionado al azar, se encuentra casi a la altura de avenida Monroe en el bajo Belgrano, justo enfrente de la plaza con el monumento a los caídos en el cumplimiento del deber de la Policía Federal. El acto debió haber sido realizado ahí, pero esto resulto imposible, por encontrarse cercado y en obras de reparación.
Son las doce menos cuarto cuando llega el candidato a presidente, a su encuentro van cuatro mujeres, en representación de dos asociaciones nacidas fruto de la inseguridad, una de ellas es Vecinos Alerta, la otra AVIVI, que se encarga de asistir a victimas de violación, encabezada por su titular, Maria Elena Leuzzi. Los cinco se pasean entre las cruces mientras conversan y luego posan para las cámaras. Lavagna se acerca hacia donde se encuentra el grueso de la gente, se agacha de frente a una cruz y en forma lenta, esperando para que lo puedan filmar y fotografiar escribe sobre la cruz el numero 2115, acción que oficializa el comienzo del acto, que no será mas que una especie de conferencia de prensa. Uno de sus asistentes reparte entre los periodistas una fotocopia en la cual se explica que ese es el número de muertes dolosas registradas en 2005, ultimo año del que se tiene registro, y que esto significa un promedio de ocho muertes por día. Cosa que repetirá el candidato en más de una oportunidad, agregando que en Capital Federal una de cada cuatro personas ha sido victima de un delito y que una de cada ocho lo ha sido de un delito violento.
La conferencia transcurre animada por las preguntas de la prensa, aunque Lavagna se encarga de aclarar que no se hará una presentación exhaustiva del plan de seguridad y ya que eso fue realizado en un acto en la ciudad de Córdoba, dejando entrever el concepto simbólico de este acto.
Luego de la rueda de preguntas, uno de los asesores del candidato le presenta a dos ciudadanos que actuaran como fiscales por el UNA en las elecciones venideras, a los cuales saluda breve pero cordialmente intercambiando unas pocas palabras. Sin darle descanso un rubia cronista de C5N se abalanza sobre Lavagna preguntándole sobre el pedido de impugnación a la candidatura de Francisco de Narváez, cosa que irrita al candidato generando en el una inesperada reacción, corre el micrófono con el antebrazo y espeta tajante, “ya le dije que de ese tema no voy a hablar, no me interesa” fijando claramente su posición.
Ya son casi las doce y media, la gente comienza a desconcentrar, pero las cruces permanecen ahí, símbolo de un problema que hasta ahora nadie ha podido resolver.

Nicolás Ariño Vojacek

Lavagna contra la inseguridad

El candidato a presidente por UNA, Roberto Lavagna, se presentó ayer por la mañana en una plaza del barrio porteño de Núñez para pedir por la seguridad.
El acto estaba programado para las 11:45 en Av. Figueroa Alcorta y Monroe, donde el candidato presentaría medidas específicas en materia de seguridad ciudadana.
La plaza estaba repleta de cruces blancas en el piso, que representaban a las víctimas de homicidios durante 2005. La ubicación era representativa en tanto al lado de la plaza se encuentra el monumento a los caídos durante el cumplimiento del deber.
A las 11: 55 llegó al lugar el candidato, quien inmediatamente fue rodeado de tres mujeres representantes de “Sociedad Alerta” y la presidenta de Ayuda a Víctimas de Violación (AVIVI), María Elena Leuzzi, con quienes conversó unos minutos.
El acto se dio por comenzado cuando Lavagna tomó un marcador y escribió en una de las cruces el número 2115, haciendo alusión a la cantidad de muertos por la delincuencia durante 2005, último año del que se poseen cifras oficiales.
El candidato destacó que la intención de la escena era la de generar el impacto más fuerte posible para que se tome conciencia sobre el problema de la seguridad.
Lavagna apuntó directamente contra el Gobierno, y más precisamente contra el Jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quien en un momento se hubiera referido al tema de la inseguridad como una “cuestión de sensación”.
El ex Ministro llamó a reclamar la atención la inseguridad, una realidad que el Gobierno niega y que por eso no puede resolver.
En cuanto a su programa para combatir la inseguridad, el candidato destacó que el plan completo ya había sido presentado en la ciudad de Córdoba y que “hoy (por ayer) el intento era un impacto frente a la negación”. Solo resaltó que en su programa la inseguridad se combatirá a través de tres medios: justicia, policía y medidas legales específicas.
Lavagna se negó a dar declaraciones sobre asuntos que no concernieran al tema específico por el que se había programado el acto; y afirmó que “no hay que concentrarse en temas menores”

Micaela Ortelli

martes, 23 de octubre de 2007

Los muchachos peronistas, siempre unidos ¿triunfaremos?

Es prácticamente un hecho que en la Argentina es muy difícil llevar adelante la gobernación sin la foto del General colgada en la pared. El UNA no es una excepción a esa regla y ayer se lanzó a la pesca de los votos peronistas.

Ayer 17 de octubre, la concertación liderada por Roberto Lavagna no se quedó atrás en los festejos por un nuevo aniversario del día de la Lealtad Peronista. La cita fue en Club Atlético All Boys, ubicado en el barrio porteño de Floresta.
El acto estaba previsto para 19:30; pero recién a las 19:50 hizo su aparición la banda de bombos y platillos que le dio clima político a la ocasión. Hasta entonces, unas pocas personas, la mayoría corresponsales de prensa, aguardaban afuera del club, donde el calor y la humedad de esa tarde de octubre se hacia más tolerable.
Una vez adentro, lo que no podía faltar: el documental que muestra aquel 17 de octubre de 1945, con la muchedumbre paseándose por las calles, los “descamisados” refrescándose en la fuente de Plaza de Mayo, el glorioso discurso de Juan Domingo Perón.
Pasaría más de una hora para que el líder de UNA diera el presente junto con el candidato a senador por la Ciudad de Buenos Aires, Abel Posse; el candidato a diputado por la Capital, Alberto Coto y el resto de los dirigentes peronistas que integran la Concertación.
El festejo tuvo todos los condimentos de un auténtico acto peronista: venta de fotos y banderas del General y Evita; palabras reivindicatorias por parte del UNA; aplausos y gritos de las aproximadamente 200 personas que asistieron.
Sin embrago, a pesar de las buenas intenciones del UNA (no faltaron los “sanguchitos” al final) el acto aniversario dejó bastante que desear. Sobre todo el sonido, que esperó hasta que le tocara el turno de hablar al candidato a presidente para dejar de funcionar. ¡Esa es Cristina que cortó! ¡Fuira Cristina!, sintetizó uno de los pocos “Jóvenes del UNA” que asistieron a la celebración.
Más allá del sonido y el poco “pueblo” que asistió, el festejo transcurrió con normalidad y sin tensiones. Los candidatos tomaron la palabra unos minutos para reivindicar al PJ, hoy “vaciado de contenido”, según el candidato a presidente. Además, se aprovechó la ocasión para repasar las propuestas del UNA para este 28 de octubre.

Micaela Ortelli

Lavagna en el Día de la Lealtad Peronista

El candidato a presidente por UNA hizo un acto en conmemoración al Día de la Lealtad Peronista en el Club All Boys, en Floresta, acompañado por los candidatos a legisladores porteños y sin sus socios del radicalismo. Hubo fuertes críticas al Gobierno.

Roberto Lavagna conmemoró el Día de la Lealtad Peronista en un acto que realizó en el Club All Boys, ubicado en el barrio de Floresta, el miércoles por la noche. El candidato arribó al lugar pasadas las 20.30 hs. acompañado por su equipo de prensa y varios representantes del peronismo que adhieren a Una Nación Avanzada (UNA). Los recibió un ambiente de festejo con bombos, globos y carteles adornando las paredes. Previo a su llegada los presentes, en su mayoría personas mayores, vieron una proyección con imágenes del 17 de octubre del `45.
Junto a Lavagna subieron al escenario los candidatos a diputados Horacio Lenz y Alberto Coto; Eduardo Camaño y el candidato a senador Abel Posse. Cada uno tomó la palabra unos minutos para expresar brevemente sus ideas con respecto al peronismo y a las próximas elecciones. El único que no tenía un discurso preparado y a quien tomaron por sorpresa para que diga unas palabras fue Eduardo Camaño, a quien Lavagna presentó como “el presidente del congreso del Partido Justicialista, la única autoridad legal del Partido Justicialista”. El diputado informó a los presentes que presentó “un recurso de amparo para que el Frente para la Victoria no pueda utilizar las fotos de Perón y Evita, ni tampoco los símbolos partidarios”. También dijo que si Lavagna era electo presidente convocaría a elecciones internas del PJ para marzo de 2008.
Con algunos problemas técnicos comenzó a hablar Lavagna, ya que le falló el sonido y tuvo que elevar su voz para que las 200 personas que había aproximadamente pudieran oírlo. Una vez solucionado el asunto repasó la historia del peronismo y criticó duramente al Gobierno enfatizando que “solamente les interesa mantenerse en el poder”. Hizo un breve recorrido por el plan de gobierno que presenta la concertación que lidera remarcando que eran los únicos que habían presentado dicho plan un año antes de las elecciones. Los puntos más importantes a los que hizo referencia fueron empleo, inflación, educación, vivienda, inversión y medio ambiente. Cuando se refirió a los organismos de prensa del estado calificó a Télam de “una vergüenza nacional por trabajar descaradamente para el Gobierno y no para el Estado”; así como también remarcó la falta de debate que hubo en estas elecciones entre los candidatos. Cada vez que nombraba a su opositora Cristina Kirchner un chiflido general inundaba la sala. Sobre el final hizo referencia a un spot publicitario que saldría en los próximos días y resaltó que su propósito es lograr que la Argentina vuelva a ser “una sociedad como la que construyeron Perón y Eva”.
El acto culminó con la Marcha Peronista sonando reiteradas veces como broche final mientras ofrecían sándwiches de miga a todos los concurrentes, al mismo tiempo que se les pedía a todos que se comprometieran y se anotaran para ser fiscales el próximo domingo.

Josefina Hagelstrom

Día de la Lealtad entre recuerdo a Perón y rechazo al Gobierno

“Llegaban cantando, unidos en una sola fe”. Así define Perón, sinfonía de un sentimiento, la película de Leonardo Favio, a los miles de obreros que se congregaron en la Plaza de Mayo el 17 de octubre de 1945 exigiendo por su líder, quien estaba detenido y había sido trasladado al Hospital Militar por problemas de salud. El resto de la historia es conocida: Perón le habló a las más de trescientas mil personas que se encontraban allí y fue electo Presidente al año siguiente.
Sesenta y dos años más tarde, en la pequeña cancha de fútbol 5 del club All Boys, el candidato Roberto Lavagna lleva adelante su acto en rememoración de aquel histórico día para los peronistas. No hay miles de obreros, apenas sí doscientas personas, en su mayoría de avanzada edad, sentadas en sillas de plástico negras.
No es el único acto peronista del día. Las vueltas de la historia han hecho que haya otros dos actos en los que se recuerda aquella jornada de lucha: el de Cristina Kirchner en La Matanza y el de Alberto Rodríguez Saá en el Chaco.
Así como los manifestantes festejaron a viva voz la salida de Perón al balcón de la Casa Rosada, el arribo de Lavagna al recinto produjo que los presentes se pusieran de pie para aplaudir su ingreso y que de fondo sonaran algunos bombos. Las principales figuras del UNA se subieron a la tarima y quedaron de cara a su público, mientras que a sus espaldas, en una pantalla, se veía una imagen de Perón, otra de Evita y el escudo del Partido Justicialista en el medio.
Un póker de frases reflejan el orgullo de esos políticos por ser peronistas y su rechazo con el actual gobierno y la candidata oficial.
1)”No escondemos nuestra simbología ni la fecha. Lavagna es el candidato peronista que no esconde sus valores partidarios, que no baja las banderas”, expresó Horacio Lenz, candidato a Diputado nacional por la Capital Federal.
2)”Estoy feliz de estar este 17 de octubre con ustedes. El peronismo ha sido entregado al Frente para la Victoria y hemos presentado un recurso de amparo para que no puedan usar la cara de Perón y Evita”, reveló Eduardo Camaño, primer candidato a Diputado por la Provincia de Buenos Aires. Camaño hizo referencia así a la disputa legal que existe para que el kirchnerismo no pueda utilizar los símbolos peronistas en las boletas. Asimismo, también habló de “derrotar a los señores que un día se pelearon con Perón”, en alusión al pasado Montonero de varios de los principales dirigentes del Gobierno Nacional.
3)”El Frente para la Victoria es la Unión Democrática de 1946, pero está formada por sindicalistas que aflojan y por encuestadores”, sentenció Alberto Coto, el primero en la lista de Diputados por la Capital. De este modo, hizo una paralelismo con la agrupación que se opuso a Perón en las elecciones de 1946 y que estaba formada por partidos netamente heterogéneos.
4)”El 17 de octubre es el episodio más notorio de la vida de la Argentina. Al peronismo desdibujado de hoy debemos volver a organizarlo como el gran partido nacional”, resumió el escritor Abel Posse, quien figura como candidato a Senador por la Ciudad de Buenos Aires.
Luego fue el turno de que Lavagna tomara la palabra y tras su discurso sonó fuerte en los parlantes la marcha peronista inmortalizada por Hugo del Carril y cantada fervientemente por el público presente. No eran miles como en 1945, pero el amor por el Día de la Lealtad era el mismo.

Gabriel Sabino

domingo, 7 de octubre de 2007

ENTREVISTA A HORACIO LENZ

Horacio Lenz es profesor de geografía, milito desde muy joven en política ocupando cargos de Secretario de Prensa y Secretario de Relaciones Internacionales del Partido Justicialista. Actualmente es Subsecretario de Asuntos Políticos y Legislativos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y el próximo 28 de octubre, su nombre aparecerá en las boletas del UNA, partido que encabeza Roberto Lavagna, como tercer candidato a diputado Nacional por la Capital Federal.
En el marco del acto de presentación de los candidatos a Diputado Nacional por la Capital Federal realizada en plaza Dorrego el pasado miércoles 26 de septiembre, este medio accedió a la siguiente entrevista.

-¿Cuáles son los principales proyectos que van a presentar en caso de acceder a ocupar una banca?
-Ante todo, el tema de la coparticipación federal, vamos a enviar un proyecto para que las provincias en Argentina vuelvan a ser autónomas, federales y tengan una relación de institucionalidad financiera con el Estado Federal.
-¿Cómo es la situación de Buenos Aires respecto a esto?
- La Ciudad recibe un porcentaje ínfimo del 25% que pone en coparticipación federal, ya que un porcentaje importante está embargado por las autopistas que se hicieron en la época de (Osvaldo) Cacciatore (1976-1982). Nosotros consideramos que eso ya está pagado. Como Diputado por la Ciudad de Buenos Aires, voy a pelear para que se triplique el presupuesto.
-¿Cómo piensa resolver los conflictos entre los sectores económicos?
-El mundo moderno plantea la integración de sectores, la división es un criterio antiguo. La base de la economía argentina es agroindustrial, me parece que hay que fortalecer las ventajas comparativas que tenemos y no dividir sectores de la economía, sino incluirlos, integrarlos. La economía es una sola, es integrada, marcar diferencias no tiene ningún sentido.
-¿Cuál es su visión del modelo económico del actual Gobierno?
-Yo creo que tiene un concepto de la economía muy arcaico. Los ministros de Economía, desde que se fue Lavagna, sólo hablan con sectores, no hablan con la ciudadanía, que son los grandes referentes y los que tienen el mayor capital económico y humano. El ciudadano es el que potencia y desarrolla la economía y es a él al que hay que generarle confianza. Tanto Miceli como Peirano hablan con sectores económicos cerrados, en reuniones que definen no se sabe qué en vez de hablarle a la población, a la gente. La confianza uno la tiene que multiplicar, no sesgar.
-¿Considera que con el actual gobierno se retrocedió en estos aspectos?
-Evidentemente sí, porque es un gobierno que se aisló, que mantuvo una vinculación internacional muy sectaria y no se profundizó en términos de diplomacia y de política internacional. En materia de defensa se redujeron muchos ejercicios que se realizaban conjuntamente con Brasil principalmente y con otros países de la región, que hacían a los sistemas de confianza mutua que sirven para que todos los países tengan el conocimiento del otro sobre las capacidades militares que cada uno posee, algo que genera confianza y permite un equilibrio militar que garantiza la paz.
-¿Cuál es su opinión sobre Hugo Chávez?
-Es un dictador. No se respetan los derechos individuales, la propiedad, la libertad de expresión, la pluralidad política. Ahora inclusive quiere mandar un proyecto a su pseudo parlamento venezolano donde se pone en discusión la patria potestad de los padres en manos del estado. Eso es ser un dictador.
-Volviendo a los temas nacionales, ¿qué proyectos plantea con respecto a la educación?
-En los últimos años con lo único que nos referimos a esta materia es a través de leyes, y las leyes no determinan cuál es el modelo educativo que tiene un país. Hay que sentarse con los sectores, con la comunidad educativa, con los padres, el Estado, los gremios docentes. La educación es el único elemento que existe en el mundo moderno igualador de oportunidades. Si pensamos en el problema educativo como un conflicto de intereses entre el Estado y los gremios, nunca lo vamos a resolver. La educación tiene que ser prioritaria no solo para los gobiernos sino también para nosotros.

Nicolás Ariño Vojacek
Gabriel Sabino

viernes, 5 de octubre de 2007

Presentación de candidatos

LAVAGNA DESTACO EL COMPROMISO SOCIAL Y LA JUVENTUD DE QUIENES LO ACOMPAÑAN

Fue en un acto realizado en la plaza Dorrego en el barrio de San Telmo.

En un breve acto realizado el miércoles 26 de septiembre en la plaza Dorrego del porteño barrio de San Telmo, Roberto Lavagna presento a sus candidatos a Diputado Nacional por la Capital Federal. El mismo comenzó a las 12.30 del medio día y se desarrollo por un lapso de no más de cuarenta minutos. El postulante a Presidente de la Nación abrió la exposición con una escueta presentación de los candidatos, durante la cual hizo hincapié en el compromiso social de los mismos, reseñando algunas de las actividades por ellos realizadas en el pasado, pero remarcando por sobre todo la juventud de los mismos, haciendo una excepción a modo de broma con Alberto Coto, y la renovación que esto representa para los partidos políticos, los cuales atraviesan momentos de crisis y reestructuraciones. Lavagna se refirió también, aunque sin ahondar, a algunos temas sobre los cuales tratan las propuestas de proyecto de ley para la Cámara de Diputados, como el medio ambiente y las políticas a tomar en cuanto a la problemática social, para luego ceder el micrófono y con esto la palabra a sus candidatos, sin romper el orden en que estos se encuentran ubicados en la lista del UNA.
El primero de ellos en tomar la palabra fue el Licenciado en Ciencias Políticas, Cónsul General del Servicio Exterior de la Nación y ex Diputado de la Nación Alberto Coto, quien comenzó su exposición hablando sobre la conformación del UNA, en el que confluyen distintas vertientes de la política como el MID, el partido Popular Democrático y la Organización Amigas y Amigos de la Sociedad Civil, además de la fuerte presencia justicialista, de la que el forma parte, y de la radical. Coto se refirió principalmente al proyecto de ley de coparticipación federal, el cual seria el primero en ser presentado en caso de acceder al cargo. Este proyecto propone el aumento de la proporción de los recursos tributarios totales que se destinan a las provincias, con garantía de automaticidad en las transferencias y simplificación y transparencia en dicho proceso. También menciono brevemente otros proyectos referidos al manejo de los recursos tributarios, a la mejora del acceso a la información publica, a la propuesta de impuesto cero para pymes y a propuestas en el área de transportes.
La segunda candidata en tomar la palabra fue la abogada y especialista en temas ambientales, Soledad Aguilar, quien hablo sobre proyectos relacionados al medioambiente, como la regulación de calidad de aguas, el manejo de residuos domésticos e industriales, la ley de preservación de bosques nativos y la ley de ordenamiento territorial, la cual propone crear corredores biológicos protegidos.
El tercer candidato en tomar la palabra fue Horacio Lenz, profesor de geografía, militante político de larga data en el justicialismo y actualmente Subsecretario de Asuntos Políticos y Legislativos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, quien hizo referencia a proyectos relacionados al área de transporte, en los cuales se propone la tendencia a la expansión de la utilización de los medios públicos, para lo cual ha de ser necesaria una mejora integral de los mismos que contemple condiciones logísticas de movilidad, seguridad y calidad ambiental.
A modo de cierre del acto tanto los candidatos a diputado como el mismo Lavagna posaron para las cámaras allí presentes, sostenido carteles de colores similares a los viales, que enarbolaban consignas como pare al desempleo, pare a la contaminación, pare a la inflación y pare a la exclusión.

Nicolás Ariño Vojacek.

miércoles, 3 de octubre de 2007

Plan Lavagna: Primeros 100 días de Gobierno

El ex ministro de Economía y actual candidato a Presidente por Una Nación Avanzada (UNA) Roberto Lavagna ha creado y presentado un plan de gestión para los primeros cien días de gobierno en caso de resultar electo en los próximos comicios de octubre. Él mismo ha dicho que “los primeros cien días suelen sellar la agenda de una administración”, por lo que utilizó como estrategia principal de campaña la presentación de lo que sería su accionar en sus primeros días al frente del Gobierno. Quienes no pertenecen al mundo económico tal vez podrán criticarle el aspecto demasiado economicista del plan, que no hace tanto hincapié en otras cuestiones de igual importancia. Después de todo Lavagna es economista y ex ministro de Economía.
En declaraciones realizadas el candidato afirmó que “se trata de recuperar el rumbo perdido e implementar medidas concretas para atender los problemas de la gente: el empleo, la educación, la seguridad y la vivienda”. En agosto último, durante una conferencia de prensa que protagonizó junto a su compañero de fórmula, el titular de la UCR Gerardo Morales, Lavagna presentó su plan para los primeros cien días, el cual está basado en tres ejes principales: el empleo, la seguridad de los ciudadanos y la distribución de los ingresos.
La lucha contra la pobreza se ha convertido en la insignia de todos los discursos que el candidato ha pronunciado a lo largo de su campaña. A su vez, afirma que su objetivo principal es corregir el desvío que ha sufrido la economía y retomar su rumbo inicial, aquel que tenía cuando él se apartó del Ministerio de Economía; así como también dar una lucha integral contra la inflación. La crítica al accionar del actual gobierno es constante; tal vez esa sea su forma de demostrar que pese a que perteneció al gobierno K, lejos está de compartir la gestión que hoy lleva adelante el Presidente y la cual continuaría su mujer, la candidata por el Frente de la Victoria, Cristina Kirchner.
Como primera medida de gobierno Lavagna enviará al Congreso de la Nación un proyecto de ley de coparticipación federal para aumentar la proporción de recursos tributarios que van a las provincias. Con la mirada puesta en el incremento de las inversiones y en la generación de más empleo impulsará la ley Pyme, una iniciativa de su autoría demorada en el Senado, que exime a todas las pequeñas y medianas empresas del impuesto a las ganancias. El IVA de los alimentos básicos se reducirá a la mitad así como también se bajará el impuesto al trabajo a los empleos adicionales que generen las Pymes, todo para beneficio de los trabajadores. Eliminará los superpoderes presupuestarios y los fideicomisos, derogará la ley que dio al Poder Ejecutivo el control sobre el Consejo de la Magistratura e impulsará una ley de acceso a la información pública que garantice la transparencia de los actos de gobierno.
La rebaja de impuestos y la marcha atrás de algunas medidas del gobierno kirchnerista son los dos aspectos principales que recorren todas las propuestas del Plan Lavagna, quien se presenta como un candidato opositor y optimista con respecto al crecimiento del país en los próximos años.

Josefina Hagelstrom

lunes, 1 de octubre de 2007

Sol y picada en la presentación de los Diputados

Un grupo de personas almuerza tranquilamente en una de las mesas que están ubicadas en la Plaza Coronel Dorrego en San Telmo. Es un mediodía soleado y la temperatura es agradable como para comer al aire libre. Al mismo tiempo, en una de las angostas veredas, un grupo de artesanos exhibe sus productos: collares, aros, pulseras y demás adornos están a la vista de todos los transeúntes.
Parece un día más para el barrio, pero lo que tal vez esas personas no se imaginan es que están en el lugar elegido por el candidato a presidente Roberto Lavagna para presentar públicamente los candidatos a diputador por la Capital Federal. No hay clima político. No hay banderas, no hay cánticos, ni bombos. Ni siquiera hay público que se haya acercado a presenciar el acto (que más tarde fue definido como “simbólico” por el propio Lavagna).
Un grupo de no más de veinte señores vestidos prolijamente de saco y corbata se agrupa en la Plaza, del lado de la calle Anselmo Aieta. Se saludan cordialmente unos a otros. Varios no llegan a los treinta años de edad, se les nota en sus rostros libres de arrugas y en sus pelos algo crecidos y peinados a la moda. Otros usan anteojos de sol, como queriendo evitar ¿ser reconocidos?. Son los candidatos a diputados por el UNA, los protagonistas de la mañana.
A unos metros de ellos, los periodistas ultiman detalles para la cobertura del acto. Los movileros de las distintas radios prueban sus grabadores. En tanto, los camarógrafos instalan los trípodes y acomodan las cámaras. Uno de ellos no pierde ocasión de quejarse y decirle a su colega: “me engancharon para venir a cubrir esto, me quiero matar”.
Javier Gulli, uno de los hombres que maneja la prensa de UNA, invita una y otra vez a los periodistas a acercarse a la mesa a saborear la picada que se ha preparado como catering. Nadie se mueve hasta que un cameraman dice al aire “bueno, vamos a probar la picada de Lavagna”. Es la excusa para que todos se arrimen a probar aceitunas, quesos, salames y tostadas. Sentados alrededor de la mesa y conversando, la escena se asemeja más a una reunión de ex compañeros del secundario que a una ceremonia política. De hecho, salvo por dos afiches con la cara del candidato nada haría pensar que se trata de un acto.
Cerca de las 12:20, Lavagna se hace presente en el lugar. Se ubica delante de los dos carteles con su rostro y toma el micrófono. Frente a él, quince periodistas sentados en sillas de jardín aguardan por sus palabras. El discurso es breve y formal. No obstante, el ex ministro de Economía se guarda tiempo para hacer un pequeño chiste al decir: “la mayoría de nuestros candidatos a diputados son jóvenes excepto alguno que otro que no vamos a nombrar” y con su mano izquierda le toca la cabeza a Alberto Coto (primero en la lista) quien está sentado a su izquierda. Unas tibias risas de los presentes acompañan el gesto.
El único momento de tensión se produjo cuando un hombre que vivía en la calle lo increpó al candidato al grito de “corrupto” cuando estaba realizando una nota para un canal de televisión. Al mismo tiempo, una vecina, curiosa, se asomaba a la ventana de su departamento sobre Aieta para gritarle a un conocido del barrio “decile que lo voy a votar”. Cara y ceca del mediodía en San Telmo.

Gabriel Sabino

La estrategia de Lavagna

El 22 de julio la fórmula de UNA se presenta en un acto al pie del Pucará de Tilcara, en la Quebrada de Humahuaca, Jujuy. Al día siguiente Lavagna y Morales arriban a Tierra del Fuego, Ushuaia, donde entregan a representantes de la comunidad fueguina, una bandera argentina tejida por comunidades aborígenes del norte. De esta manera quisieron representar un abrazo simbólico al país, pero además, consagraron un método de campaña innovador aunque dudosamente efectivo.
Desde aquel abrazo, los compañeros de fórmula iniciaron una estrategia de “lobby” en las diferentes zonas del país con un discurso focalizado en la economía y en las duras críticas al Gobierno.
En el interior del país los candidatos se dedicaron a presentar su plan de Empleo y Pyme; así, cada acto estuvo estratégicamente planeado de acuerdo a la actividad económica que realizara en el área. En la región de Cuyo, el lugar elegido fue Tunuyán, Mendoza, y así lo fundamentaba el líder de UNA: “lo hacemos desde Tunuyán como símbolo y reconocimiento a la mano del hombre y a la cultura del trabajo que han permitido aquí transformar un desierto en vergel productivo y en fuentes de trabajo”
En cuanto a su gira por la provincia de Buenos Aires, el móvil elegido fue el “lavagnamovil”, el micro de campaña presentado en el Obelisco el 8 de septiembre. Con este vehículo Lavagna recorrió varios puntos de la Ciudad y del área Metropolitana, y presentó su Plan de Vivienda en el Conurbano Bonaerense, y su plan de seguridad en La Plata.
El 13 de septiembre la fórmula se traslada a la zona de la Mesopotamia para presentar su Plan de Medio Ambiente. El acto se realizó en el Parque Nacional Iguazú, en la provincia de Misiones.
El 22 de septiembre UNA lanza la consigna: “Pare la inflación, vote a Lavagna”, y realizó una recorrida por distintos supermercados de la Capital y del conurbano bonaerense con el fin de criticar el aumento de precios. Para graficar el problema se valió de uno de los componentes esenciales de la canasta familiar: la papa. Así, en una fotografía junto a Gerardo Morales que recorrió todos los medios gráficos, Lavagna mostró la diferencia entre la papa buena y la papa “oficial”, la que aparece en los precios del Indec. “La papa oficial del Gobierno se parece a un carboncito, es chiquita y negra, mientras que el kilo de papa buena cuesta casi tres veces, alrededor de 3,90 pesos”.
Sin duda Lavagna busca instalarse como el único candidato capaz de hacer frente a los problemas de la economía, tal como sucedió en 2002. Para esto se vale de duras críticas hacia el Gobierno, y de una campaña prolija y estratégicamente planeada.

Micaela Ortelli