Lavagna frente a sus contrincantes de octubre

Para las elecciones presidenciales del próximo 28 de octubre, el candidato Roberto Lavagna mantiene relaciones diferentes con cada uno de sus principales competidores.
Su mayor adversaria será Cristina Fernández de Kirchner, a quien calificó dos meses atrás como “el fruto de la acumulación de derrotas del kirchnerismo en el Interior”. El distanciamiento con el Presidente y su esposa se produjo en noviembre de 2005 cuando éste le exigió la renuncia como Ministro de Economía.
A partir de allí, Lavagna pasó a formar parte de la oposición y no perdió oportunidad alguna de criticar a la actual conducción nacional por estar en contra de varios manejos del Gobierno. Entre ellos, cabe destacar el plan seguido por su sucesora en Economía, Felisa Miceli, la crisis energética y la política exterior, sobre todo, el acercamiento con Hugo Chávez, presidente de Venezuela. Para el ex ministro, el ingreso del bolivariano al Mercosur podría hacer peligrar la estabilidad del organismo.
Cabe destacar, que el arribo del líder del UNA (Una Nación Avanzada) al Ministerio se produjo de la mano de Eduardo Duhalde allá por abril de 2002. Dos años después, la relación del ex Gobernador de la provincia de Buenos Aires con el actual Presidente entró en crisis y Lavagna quedó en el medio del conflicto, hasta su salida del Gobierno.
En tanto, con Elisa Carrió la relación es muy particular. Según las encuestas, Lavagna pelea el segundo lugar con la chaqueña, por lo que podría obtener votos del arsimo en caso de que llegue al ballotage. De este modo, su estrategia oscila entre la no agresión para no perder votantes en vistas a una posible segunda vuelta y la necesidad de despegarse de Carrió para mostrarse como el principal referente de la oposición en octubre. Es por esto que en los últimos días, el economista tildó de “poco seria” a la líder del ARI por haber afirmado que lo aventaja por diez puntos.
Otra figura clave en el panorama electoral es Ricardo López Murphy, quien estuvo cerca de integrar la lista de Carrió, aunque no llegó a un acuerdo y por eso se presentará con su partido, Recrear. Lavagna no tiene ningún tipo de diálogo con él y hasta lo criticó por su doble candidatura para Presidente y diputado por la provincia de Buenos Aires. “Alguien que pasó 13 días por el Ministerio de Economía y dejó la imagen que él dejó, tendría que callarse la boca”, disparó. Por su parte, Murphy le reprochó el haber estado tanto tiempo en el Gobierno nacional: “No se puede estar varios años en un ministerio con Kirchner y no compartir finalmente sus valores, sus procedimientos y sus estrategias”.
Con respecto a los candidatos del peronismo disidente (Alberto Rodríguez Saá y Jorge Sobisch) el líder de UNA tomó la postura de oponerse tajantemente a este grupo, pese a su origen peronista en común. “Ellos pertenecen a otro momento de la historia, a la de los ’90, a otro modelo de país”, afirmó meses atrás Lavagna, quien en algún momento fue tentado por este sector, una propuesta que finalmente quedó en la nada. Además destacó que en el ala derecha del peronismo se encuentran Menem y Rodríguez Saá, en la izquierda Kirchner y que él se ubica en el centro del movimiento.
El tablero político quedó establecido y es cuestión de esperar a ver quién realiza los mejores movimientos en caso de que haya una segunda vuelta.

Gabriel Sabino